El buen pastor conoce a sus ovejas, estas le oyen y reconocen su voz.
¿Cómo está nuestro oìdo para querer escuchar a Dios? ¿Escuchamos (entendemos) al Pastor cuando llama por medio del Magisterio de la Iglesia? ¿Sabemos reconocerle entre las mentiras del mundo que contradicen a la Revelación?
Podemos haber perdido de vista el horizonte, pero Dios esta siempre ahí para cuidarnos y llevarnos de vuelta al rebaño.
En este dìa debemos ser honestos con nosotros mismos y preguntarnos si hemos pasado de "creer en Dios" a "creerle a Dios".
Josè Mendoza, op
No hay comentarios:
Publicar un comentario