domingo, 30 de diciembre de 2018

Solemnidad de la Sagrada Familia de Nazaret


En la solemnidad de la Sagrada Familia hemos recordado que ella es el lugar en donde crecemos en valores humanos y practicamos de primera mano las virtudes cardinales. Sn. Pablo nos da instrucciones muy pertinentes para la sana convivencia familiar. Y el profeta nos habla sobre las gracias y dones que Dios da a quienes cumplen con el 4o Mandamiento.

Pero quiero centrar mi atención en la pregunta que hace Jesùs a sus padres: "No sabían que debo ocuparme en las cosas de mi Padre?".

El deber de los hijos es cumplir con la voluntad de sus padres, en agradarles y amarles intensamente. Esto se traduce en obediencia. Jesùs nos muestra que todos somos hijos de Dios y cumple a la perfección con esta realidad cristológica. Por tanto, los padres han de saber amar a Dios con la generosidad de darle a sus hijos para el bien de los hombres, pero jamás sin dejar de darles una educación cristiana partiendo del ejemplo y orientada al bien común.

El deber de los maridos es amar a sus esposas y no ser rudos con ellas, el de las esposas es obedecer a sus maridos por amor al Señor, el de los hijos, obedecer a los padres en todo lo posible. Que los padres no exijan demasiado a los hijos (no pidan imposibles) para que no se depriman al no poder dar gusto en todo a sus padres. Pablo no deja fuera el don del consejo y la gratitud que asiste a los cónyuges.

Si queremos tener familias coherentemente cristianas, Jesùs ha de ir al centro de toda ella (comedor, oración familiar, trabajo, dormitorio, diversiones, conversaciones, generosidad, sacrificio, etc), luego Marìa con el rezo del sto. Rosario y demás oraciones marianas y sn. Josè encarnado en la práctica de las virtudes cardinales.

Seguimos en la Octava de Navidad, vivamos este tiempo en acción de gracias.

Josè Mendoza, op




martes, 25 de diciembre de 2018

No se queden ahi mirando al cielo

Ojalá  no se hayan pasado el adviento sòlo en las pastorelas. 

A veces la gente olvida que el acotecimiento central de la Navidad consiste en la venida del Mesias. En esto se funda nuestra alegrìa...no en la comilona, en los bailes o regalos. Cuando te enamoras no dejas de contar el tiempo para verte con la persona amada. Pero este día las misas de la mañana están casi vacías, cosa que para quienes disfrutamos el acogimiento interior no causa ninguna molestia, pero en las tardes pasa todo lo contrario. Casi que no cabe un alma en los templos catòlicos.

Bueno es que haya asistencia, pero ¿bajo què motivación? 

Hemos entrado a la Octava de Navidad, por eso decimos que no recordamos una mera fecha, sino el Gran Acontecimiento de la venida del Salvador, la manifestaciòn (del hebreo Kavod: Gloria) de Dios . 
Vivamos este tiempo litùrgico con fe para que la Paz que se ha encarnado no se quede en sentimentalismos sino que se funde en la verdad de los hechos: Jesucristo, verdaderamente hombre y verdaderamente Dios, y seamos por su divinidad santos. 
La santidad que se manifiesta en nosotros mediante el testimonio que damos.

Podemos alabar mucho a Dios y acto seguido despreciar al pròjimo.

Josè Mendoza, OP


domingo, 23 de diciembre de 2018

San Francisco de Sales (1567-1622)
obispo de Ginebra y doctor de la Iglesia
In Ephata I, Le Sarment

“El Todopoderoso hizo en mí maravillas”
Lo propio del Espíritu Santo, cuando entra en un corazón, es echar fuera toda tibieza. Ama la prontitud y detesta las tardanzas en la ejecución de la voluntad de Dios... “María se puso en camino y se fue de prisa”...
¡Qué gracia colmó la casa de Zacarías cuando entró María! Si Abrahán recibió tanta gracia por haber hospedado en su casa a tres ángeles de Dios, ¡cuántas bendiciones no caerían sobre la casa de Zacarías donde entró el ángel del gran consejo (Is 9,6), la verdadera arca de la alianza, el profeta de Dios, Nuestro Señor oculto en el seno de María! Toda la casa se llenó de alegría: el niño saltó, el padre recobró la vista, la madre fue llena de Espíritu Santo y recibió el don de la profecía. Al ver a Nuestra Señora entrar en su casa, exclamó: “... ¿Cómo es posible que la madre de mi Señor venga a visitarme?” Y María, escuchando lo que Isabel decía de ella, se humillaba y daba gloria a Dios por todo. Confesando que toda su felicidad procedía de que Dios “había mirada la humildad de su sierva” entonó este bello y admirable canto del Magnificiat.
¡Qué llenos de alegría deberíamos estar nosotros cuando nos visita este divino Salvador en el Santísimo Sacramento, en las gracias interiores y en las palabras que cada día dirige a nuestro corazón!

domingo, 16 de diciembre de 2018

Alègrate con verdadera alegría



¿Què debemos hacer para estar verdaderamente alegres?

- Quien tenga dos camisas, que dè una al que no tiene ninguna.
- Quien tenga comida, de a quien no tiene nada para comer.
- No cobren màs de lo pactado.
- No extorsionen, ni levanten falso testimonio contra su hermano, vivan ordenadamente.

Estos son los excelentes consejos que nos da Juan el Bautista para prepararnos a la venida de aquel que tiene el bieldo para separar el trigo de la paja (autoridad), de quien no es digno Juan ni de desatar sus sandalias (por su naturaleza divina). El que bautiza con el Espìritu Santo y fuego (Dios).

Alegrarse con verdadera alegría, porque muchos sólo se alegran en apariencia. Creyendo que por la vanidad y presunción con qué hacen sus "buenas obras" ya tienen algún mérito. 
Primero, el mérito es del Señor, y segundo, toda obra que se hace para ser vistos y aplaudidos, ya tuvo su premio en esta vida. 

En las fotos seguro que tratamos de salir sonrientes, se pretende transmitir el ideal de una felicidad, son semejantes a quienes buscan verse atléticos sumiendo la panza. 

La alegría por La Navidad se vive en la medida en que damos en el silencio, sin que se hagan fanfarrias ni se publiquen en todas las redes sociales.

La fuerza de la Iglesia se vive en lo poco... y el que es fiel en lo poco, Dios le confiará en lo mucho. El mundo de hoy no será mejor por tener muchas fotos con la gente sonriente, serà màs justo porque esa alegría se vive en el día a dìa y se manifiesta con obras concretas de misericordia.

Josè Mendoza, OP


domingo, 9 de diciembre de 2018

Hagan rectos sus senderos


Todos hemos oido decir "antes de y después de Cristo". Pues bien, dicho sea de paso el evangelio de hoy nos da respuesta del porqué este corte en la historia humana. 

Al darnos datos históricos tan exactos y comprobables por el mismo historiador Flabio Josefo, Lucas esta dando fe de lo expuesto, con datos de nombres y lugares que son entendidos por los propios de su tiempo y para rebatir, en el caso de que fuera mentira, nadie mejor que sus contemporàneos.

Por Isaias sabemos cuales deben ser nuestras labores en el presente Adviento: 

"Preparen el camino, hagan rectos sus senderos. Todo valle será rellenado, toda montaña y colina, rebajada; lo tortuoso se hará derecho, los caminos ásperos serán a llamados y todos los hombres veràn la salvación de Dios".

Ahora veamos con detenimiento cada uno:

Prepararen el camino, se refiere a estar preparados con la oración y en nuestras labores, no buscando protagonismo ni mitigar las conciencias llenándonos de "buenas obras" para ser vistos.

Hagan rectos sus senderos, equivale a la conversión, un volver a comenzar tras evaluar nuestra forma de proceder, sentir y pensar conforme a los mandamientos del Señor.

La cita de Valle, montaña y colina (serán rebajadas) es quitar de nuestra vista aquellos que nos agobia; problemas u otro tipo de situaciones. No porque serán resueltas por arte de magia, sino porque hemos de saber dar prioridad a lo importante, y el resto nos vendrás por añadidura.

Lo tortuoso se hará derecho, y los caminos serán corregidos. Esto es enmienda, por eso les digo que no se puede hacer el bien de mala manera. primero depongamos el orgullo y nuestros resentimientos, luego ya podremos servir con libertad de conciencia.

Finalmente, los hombres verán la Salvación de Dios. ¡Grandiosa promesa que se ha cumplido en Cristo Jesùs!.

Entonces, nuestra esperanza no esta puesta en una mera fecha, sino en el GRAN ACONTECIMIENTO de la venida del Mesìas prometido. 

Vivamos con verdadera fe, esperanza y caridad este tiempo  litùrgico sirviendo a Dios en nuestro pròjimo.

Josè Mendoza, OP





domingo, 2 de diciembre de 2018

Hacer bien el bien


No es ninguna novedad decir que hoy es el Primer Domingo de Adviento, lo que sì es noticia es lo  anunciado por el Adviento. 

Los católicos no celebramos una fecha sino un acontecimiento, la venida del Mesìas (Jer 33, 14- 16) y todo lo que ha de significar el cumplimiento de la promesa de liberación, así como su preparación: estar alertas, poner atención, velar y hacer oración.

Pero deseo centrar mi atención en la 2a lectura:
"vivan como conviene, para agradar a Dios según aprendieron de nosotros, a fin de que sigan ustedes progresando".

San Juan Damasceno decía que "el bien no es bueno cuando no se hace bien". En esta época afloran sentimientos de "solidaridad", pero eso no es lo importante, ni siquiera pensar por qué esos sentimientos no se hacen presentes durante el resto del año civil. 

Lo verdaderamente importante es valuar como esta nuestra alma al momento en que damos según nos manda la Iglesia. Quizás sólo tratamos de mitigar nuestra conciencia, practicar el buenismo para ser vistos y aplaudidos, o por una simple tradición.

Antes de dejar tu ofrenda en el Altar ve con tu hermano y reconcíliate, este consejo nos lo da el Señor. Agrademos a Dios de corazón, no sòlo de palabras. 

Josè Mendoza, OP


domingo, 25 de noviembre de 2018

Cristo Rey del Universo

"Yo soy el Alfa y el Omega, dice el Señor, el que es, el que era y el que ha de venir, el todopoderoso"
(2a lectura)

Dios siempre ha defendido la vida, èl es la vida. Esta presente en la historia de la humanidad porque ya existía antes de todo lo creado y seguirà existiendo tras el fin de los tiempos. Por eso, desde las expresiones de fe de los primeros siglos se dice que es "Engendrado no creado".

Este domingo celebramos el cierre del año litúrgico con la solemnidad de Cristo Rey. Cerramos ademas el año dedicado a la vida consagrada. 

El profeta Daniel es quién inicia con el estilo apocalíptico, de ahí que de la primera a la segunda lectura se toca el tema de la soberanía de Jesucristo, Señor de todas las naciones. 

Al final, la pregunta de Pilato resulta ser afirmativa, siendo así que Jesùs es Rey y su reino no es de este mundo; no es así de egoísta, violento y pecaminoso como nuestra realidad actual.

La pregunta que nos debe confrontar durante la semana es ¿en verdad Jesùs es Rey en mi corazón y de mi vida?

Recuerdo la alabanza: "Reine Jesùs por siempre, reine en tu corazón" (esto último es mi adaptación)

Pilato le dijo: "¿Conque tù eres rey?" Jesùs le contestó: "Tù lo has dicho. Soy rey"

¡Feliz Adviento!
Josè Mendoza, OP

domingo, 18 de noviembre de 2018

El kairos


Antifonìa de entrada:
Yo tengo designios de paz, no de aflicción, dice el Señor. Ustedes me invocaron y yo los escucharé y los librar de la esclavitud donde quiera que se encuentren.

Los hombres  vivimos en el llamado Kronos (tiempo en negativo) pero la Iglesia va en el tiempo de Dios llamado Kairòs (tiempo en positivo), ¿cual es la diferencia? El primero parte del día 1 hacia el dìa cero, mientras que el segundo va de nuestro bautismo hacia la eternidad.

En el tema central en las lecturas de hoy resalta el estilo apocalíptico inaugurado con el profeta Daniel, seguido de la 2a lectura con el sacrificio único y definitivo de Jesùs encaminado a la vida eterna. Finalmente, Marcos nos propone la parábola de la Higuera para enseñarnos a reconocer los signos de los tiempos en lugar de afanarnos en saber el dìa y la hora. 

Notemos lo que la moniciòn antes del Evangelio nos dice: 
Sn. marcos anuncia el final de los tiempos y la venida ultima de Cristo y nos exhorta a la espera vigilante.

¿Cuàl ha de ser la actitud del cristiano al reconocer en las lecturas los signos de los tiempos? "Velen y oren, para que puedan presentarse sin temor ante el Hijo del hombre" (Aleluya)

La vida del cristiano es un ir a Dios en la Vida divina partiendo desde ya por medio de los Sacramentos (los signos)

Josè Mendoza, OP


domingo, 11 de noviembre de 2018

Contemplar y compartir de lo contemplado


Jesùs es llamado "Maestro de la contemplación", en el Evangelio de hoy nos dice que se hallaba sentado frente a las alcancías del templo... MIRANDO.

El Señor se detiene a contemplar la realidad no las apariencias: 

"yo les aseguro que esa pobre viuda ha echado en la alcancía màs que todos. Porque los demás han echado de lo que les sobraba; pero esta, en su pobreza, ha echado todo lo que tenga para vivir".

Las riquezas no son malas si no la utilización que hacemos de ellas.

Si estamos pendientes de las necesidades de los demás y vemos de manera eficaz la forma de ayudarles desde nuestra propia realidad, estamos agradando a Dios que nos manda amar al pròjimo como a mì mismo. Así se entiende que en la paràbola de Làzaro y el Rico, este que no hizo daño al pobre Làzaro, tampoco le dio como aliviar sus necesidades.

No podemos, si nos decimos "cristianos", vivir desinteresados de las necesidades de los demás, sea con nuestras oraciones o de forma màs tangible en acciones concretas darles con amor y generosidad... entonces, podremos decir que tenemos los mismos sentimientos que el Señor (amamos como Cristo y servimos como Èl)


Josè Mendoza, OP


domingo, 4 de noviembre de 2018

Shemà Israel



Con la plegaria que leemos en el Deuteronomio: "Escucha Israel", Jesùs enfatiza al Escriba los deberes de la vida cristiana: Amaràs al Señor, nuestro Dios, y al prójimo, como a ti mismo.

Ante la respuesta del Escriba, Jesùs le dice: "no estas lejos del Reino de Dios". El escriba, cuyo nombre no sabemos, podría ser cualquiera de nosotros. 
Los escribas son conocidos por defender la ley y las tradiciones del judaísmo. Podríamos llamarlos hoy en dìa como Dogmáticos y/o fundamentalistas.

Los primeros omiten toda discusión pues "ya todo esta dicho" y los segundos se basan únicamente en el texto. 

¿Conoces a alguien así?... pues bien, no nos detengamos a hacer juicio estériles pero conviene aprender a diferenciar. 

La frase: "no estas lejos"; quiere decir que el escriba, como muchos de nosotros, sabia la ley, pero cuando la oportunidad se presenta negociamos y acomodamos la verdad a nuestra conveniencia. Pasamos de una fe "dogmática" a una "de supermercado".

Esto no es lo que quiere nuestro Padre. En estos dos mandatos se resumen la Ley y los Profetas (el Decálogo). Por eso, valen màs que todos los holocaustos y sacrificios.

Nos llenamos la boca de Dios pero olvidamos los principios fundamentales del cristianismo, el amor de tipo exclusivo a Dios y de manera eficaz al pròjimo.

Josè Mendoza, OP




domingo, 28 de octubre de 2018

¡Hijo de David, ten compasión de mì!


En el evangelio de hoy notamos dos tipos de ceguera: una física y otra, espiritual. Bartimeo padece la física, pero quienes siguen a Jesùs sin ser sus discìpulos, esos padecen de ceguera espiritual. 

Marcos acentúa que había "mucha gente" y "discípulos". Podríamos preguntarnos si Bartimeo era de los discípulos o de los otros. A decir verdad, la palabra "Maestro" que usa este hijo de Timeo nos hace pensar que era un discípulo, porque le conoce, sabe que es el "hijo de David" y cree que es también el mesìas prometido: "ten misericordia de mì". 

Quienes le reprendían buscaban callar al Ciego e impedirle llegar a Jesùs. Eso a Bartimeo no le importa, sigue gritando pues sabe bien quien esta pasando por su vida... ve con los ojos de la fe. Por eso Jesùs acentúa que por esa misma fe, se ha salvado.

Tù y yo, ¿padecemos ceguera espiritual?, ¿reprendemos a quienes nos hacen ver la propia ceguera?, ¿Somos realmente discípulos de Jesùs? 

Estas y otras preguntas nos han de incomodar durante la semana para que no quedemos dispersos en el buenísimo.

Josè Mendoza, OP




domingo, 21 de octubre de 2018



"Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espìritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo".

1) Jesùs esta dando una especie de "testamento" (Nuevo). 
2) Establece que su autoridad viene de lo Alto. 
3) A sus Apóstoles les manda a hacer discìpulos mediante el Bautismo. 
4) Termina con la promesa de no dejarnos solos, se queda con nosotros en los Sacramentos hasta el fin del mundo. 

¿Què nos dice esto en el domingo mundial de las misiones?

Primero que la autoridad de la Iglesia de "ir y enseñar" no es nuestra sino que viene de Cristo. Entendamos que ser misionero, a lo cual estamos todos llamados en desempeñar desde nuestro bautismo, consiste en servir. 
Este "Servir" se entiende como un "manifestar la victoria de Dios guardando el derecho y practicando la justicia". Para ello el misionero ha de "perseverar en la Alianza".

Por tanto, misionero no es aquel con mera retórica que al darse la vuelta vuelve a las cosas del ayer. No quiere decir que por el testimonio seamos misioneros, sino que con nuestra coherencia manifestamos la Victoria del Señor, perseverando en la Alianza, guardando el derecho y practicando la justicia.

Esta victoria es el fruto de nuestra formación integral como discìpulso del Señor. La formación no se trata de rellenar pollitos de engorde, sino de hacer una cosa nueva, como bien dice Jesùs "vino nuevo en odres nuevos". La Victoria del Señor equivale a dar paso al Hombre Viejo para que surja el Hombre Nuevo (transformado por el bautismo en hijo de Dios).

Termino con la bendición de Aaròn adaptada en la Antifonìa de entrada:

El Señor tenga piedad y nos bendiga, haga brillar su rostro sobre nosotros, para que en la tierra se reconozca su dominio, y su victoria entre las naciones.

Les insto a leer las lecturas siguientes a la semana para comprender mejor el contexto del texto de este dìa.
Josè Mendoza, op






domingo, 14 de octubre de 2018

No basta con "no hacer el mal"


Prudencia... la tuve en màs que la salud y la belleza; la preferida a la luz, porque su resplandor nunca se apaga. Todos los bienes me vinieron con ella; sus manos me trajeron riquezas incontables. 

El Papa Francisco en la misa de Canonización de nuestro San Romero de Amèrica, decía: "no basta con no hacer el mal, es necesario darle nuestro corazón al Señor"

A falta de la práctica de las virtudes cardinales (prudencia, justicia, fortaleza y templanza) algunas personas caen en el activismo religioso, siendo que sin saberlo, andan enfermos de narcisismo. Todos podemos caer en estos problemas si nuestro fin último no es Dios sino nosotros. 
La vida es un camino en donde podemos y debemos ejercitar las virtudes o bien, adquirirlas con perseverancia. De lo contrario, nuestra vida será llevada de aquí para allá, zarandeada por las emociones y las tentaciones. 

La Palabra de Dios es viva y eficaz, màs tajante que espada de doble filo, penetrante hasta el punto donde se dividen alma y espíritu... juzga los deseos e intenciones del corazón. no hay criatura que se escape de su mirada. 

Conviene hacernos las mismas preguntas de cómo llevamos la vida al dìa de hoy:

¿Què debo hacer para alcanzar la vida eterna?

¿Quien puede salvarse?

No caigamos en la trampa de creernos "buenos" porque hemos hecho "grandes cosas para el Señor" y somos "intachables" segùn nuestra propia Torre de Babel
Para renunciar a estas "riquezas" a las que nos aferramos, necesitamos dejarnos exhortar con humildad y penitencia por la Palabra que nos llama a la conversión. 

Siempre hay algo que se puede trabajar en nuestra vida espiritual... la lucha no cesa hasta que expiremos. 

¡Vale la pena ser santo!

Josè Mendoza, OP

domingo, 7 de octubre de 2018

No se avergüenza de llamarnos "Hermanos".



"¿Es lícito al hombre divorciarse de su mujer?".

Ellos dijeron: "Moisés permitió redactar una declaración de divorcio y separarse de ella".


"El que se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra aquella; 
y si una mujer se divorcia de su marido y se casa con otro, también comete adulterio".

Quiero hace notar que Jesùs habla de "licitud" o sea de Ley natural:

La ley moral natural, según santo Tomás de Aquino, "no es otra cosa que la luz de la inteligencia infundida en nosotros por Dios. Gracias a ella conocemos lo que se debe hacer y lo que se debe evitar. Dios ha donado esta luz y esta ley en la creación
(Veritatis Splendor, n. 40; cf. también Catecismo de la Iglesia católica, nn. 1954-1955).
Se le llama ley natural porque todo ser humano está sujeto a ella ya que contiene sólo los deberes que son derivados de la misma naturaleza humana y porque su esencia puede ser captada por la luz de la razón sin ayuda sobrenatural.

Ahora bien, la ley entendida por los fariseos era la de una cultura que negaba la dignidad igualitaria del hombre y la mujer. 

En cambio, Jesùs, exhorta a los apóstoles a guardar la dignidad de ambos buscando el bien segùn el precepto divino dado a nuestros primeros padres. 

Leamos Mc 10, 2-16
"El que se divorcia de su mujer (...) si una mujer se divorcia de su marido"

Nótese que la dinàmica sobre el señalamiento contra el adulterio se aplica para el hombre y para la mujer (dignidad por igual)
La clave para entender lo que Dios quiere de la fidelidad a sus preceptos se dicta en al final de la 2a lectura, sabiendo que la voluntad de Dios quiere salvarnos y que seamos santos e irreprochables:

"Porque el que santifica y los que son santificados, tienen todos un mismo origen. Por eso, él no se avergüenza de llamarlos hermanos"

(Esto también sirve para todo bautizado) 

Finalmente, hemos de mencionar las funciones del matrimonio: Unitiva, procreativa y educación de la prole... eso es tema para otra ocasión.

Josè Mendoza, op

domingo, 30 de septiembre de 2018

Signos proféticos

En las lecturas de hoy, partiendo del Evangelio, nos refieren a la denuncia, sirve para que el Señor nos diga, de manera muy suya, los designios de la gracia.

En el Evangelio notamos la fórmula "si tu (...) es ocasión de pecado, córtatela"

Apoyándonos del sentido moral podríamos entenderlo como una sentencia: quitar de nuestra vida aquello que nos aleja del amor del Padre. Para luego, abandonarnos a la voluntad del Señor, dada a nosotros en los Mandamientos.

Analicemos los signos:
1) Mano: son las acciones propias de nuestra voluntad.
2) Pie: mi escala de valores. Hacia donde voy en la vida.
3) Ojo: mi criterio (¿què ando buscando?)

Para comprender mejor estas imágenes conviene releer la 2a lectura: "entregados al lujo y al placer, engordando como reses para el dìa de la matanza. Han condenado a los inocentes y los han matado, porque no podìan defenderse".
Se entiende pues, como nuestra manera de ver la vida, de buscar el "gozo" y juzgar no siempre a la Luz de la Verdad, puede darnos un "falso positivo".

Retomemos ahora la 1a lectura: "Ojalà que todo el pueblo De Dios (la Iglesia) fuera profeta y descendiera sobre ellos el espíritu del Señor".

De esta forma, Moisés habla en clave eclesiològica y en sentido anagògico.

Si hemos prestado atención, màs allá del barullo de nuestras ideas, los textos nos refieren a la denuncia oportuna de la relación de los hombres entre sí y con Dios. Violaron los preceptos Divinos y la dignidad humana por la búsqueda de una vida còmoda alcanzada con riquezas corrompidas por la forma en que las obtuvieron; el profeta debe decir tal cual las cosas como son, sin tapujos. 
Dios le ha encomendado la labor de construir el Reino por medio de la Palabra.

El signo profético se comprende en el modo de vivir segùn cada uno. Es ir de las apariencias a un estilo verdadero y eficaz de ser cristianos. Aquel que predica con la verdad, 'ha de caer mal'

El profeta tiene como deber agradar a Dios, no a los hombres. 

Quitemonos la idea caricaturesca de la adivinación, esos son charlatanes no profetas, segùn el corazón de Dios.

Josè Mendoza, op


domingo, 23 de septiembre de 2018

La lucha por el poder

Las lecturas de hoy nos presenta la escena en donde Jesùs habla sobre el Anuncio de su pasión mientras los discìpulos se afanan sobre quien será el "primero". 

Les cuestiona, ¿de què discutìan sobre el camino?.

Imagino que habrán sentido vergüenza al verse sorprendidos en asuntos tan poco importantes, pues con su respuesta, Jesùs les muestra el camino de su voluntad. El poder que ostentan se logra con el servicio. El verdadero poder no esta en someter a otros. 

Pero este servicio no siempre serà reconocimientos y aplausos, pues el profeta debe hacer denuncias. Nos lo dice la 1a lectura: "los malvados" atacan a los profetas, porque estos les echaban en cara las violaciones que ellos habían cometido contra la Ley. Y recalca, "nos reprende las faltas contra los principios en que fuimos educados". El profeta no anuncia inventos, sino que señala hechos cometidos que contradicen la Ley de Dios. Estos señalamientos son molestos, máxime para quien sabe bien en donde esta fallando y sabe que no debe hacerlo, en cambio, no le conviene mostrarse débil y pecador, por tanto, le es mejor matar el prestigio y la cercanía de quien hace la denuncia. 

"Gente arrogante y violenta contra mì se ha levantado. Andan queriendo matarme", dice la 2a estrofa del Salmo. con estas palabras el salmista nos invita a unir nuestras situaciones al corazón de Jesùs, el siervo de Yahvè. Es una respuesta de fe. Amor incondicional en respuesta al amor incondicional.

Amar al Señor en lo que me gusta y en lo que no me gusta. 

El sabio segùn Dios se da a conocer en la pureza de intenciòn, en amar la Paz, tener comprensión, ser misericordioso  dócil, da frutos buenos, es imparcial y sincero. Siembra la Paz y cosecha frutos de justicia. 

En cambio, el que idolatra el poder, los aplausos y la felicidad obtenida por medios materiales y los placeres, esta en guerra dentro de sì, sometido a sus bajas pasiones de codicia, envidia y rivalidades.

Josè Mendoza, OP




domingo, 16 de septiembre de 2018

Seguir a Cristo


El Evangelio de hoy tiene tres puntos medulares sobre el seguimiento de Jesùs: la renuncia, cargar la cruz y el seguimiento.

El camino cristiano es para todos quienes han aprendido lo que significa ser humildes y sencillos, como cantábamos en la 3a estrofa del salmo. Por eso se entiende que estos tres pasos son signos de la fe:

1) La renuncia de uno mismo, es votar nuestra coraza de egocentrismo y vanidad, las bajas pasiones como la codicia, y sensualidades del placer y el dinero. Esa exagerada tendencia a la buena fama no permite que sigamos al Señor con sencillez. 

2) Cargar con la Cruz de cada dìa, para que en nuestra propia realidad que es la vida interior podamos ser santos y agradables a Dios, es la santidad que en los Sacramentos y la vida de oración coherente,  se vuelven signos de nuestra caridad. 

Esa caridad eficaz y solidaria con el necesitado, fruto del verdadero cristiano. Eficaz porque no anda con discursos moralistas ni fingimientos. No es un amor de ficción ("Que te vaya bien; abrìgate y come"), de esos con "buenos deseos" pero maledicencia y envidia, egoísmo y faltas de caridad contra el pròjimo. 

El seguimiento conlleva la renuncia de uno mismo y cargar con la propia realidad, por tanto se vale de la perseveracia. 

La lectura del dìa de hoy nos permite hacer una interpretación con el sentido literal propio que contiene un cierto sentido moral. Por tal razón, el apòstol nos exhorta a una fe vivida en congruencia con nuestras palabras. 

Para terminar, te quiero hacer una pregunta "¿en què parte del viacrùcis va tu vida?"... esta fe que profesamos hoy no se basa en "ir a misa de domingo y cumplir", sino que mueve nuestro corazón e incentiva a la conversión, teniendo siempre presente que "El Señor es mi ayuda" (1a lectura).

Josè Mendoza, OP


domingo, 9 de septiembre de 2018

Jesùs nos abre los ojos


CEC 1941 Los problemas socioeconómicos sólo pueden ser resueltos con la ayuda de todas las formas de solidaridad: solidaridad de los pobres entre sí, de los ricos y los pobres, de los trabajadores entre sí, de los empresarios y los empleados, solidaridad entre las naciones y entre los pueblos. La solidaridad internacional es una exigencia del orden moral. En buena medida, la paz del mundo depende de ella.

Jesùs tomò al ciego y lo aparto; se lo llevo a parte quiere decir que lo saco de un sistema que lo oprimía, lo despreciaba. 
El dedo de Jesùs (el poder de Dios) cumple con la primera lectura según el profeta Isaías y evoca el cántico del salmo (ambas lecturas de este domingo), para fijar nuestra atención en la salvación de Jesucristo, que nos saca de esas situaciones injustas, sana nuestras heridas y toca nuestra vida mostrándonos los caminos de la solidaridad para con el pròjimo.

Bien decía un hermano de mi fraternidad, hoy en la formación permanente: 

"De què me sirve saber todo, si no tengo amor, nada soy" 
(Antonio Portillo)

Josè Mendoza, OP


domingo, 2 de septiembre de 2018

¿Quien obra justamente?








El salmo de hoy se halla en un grupo dedicado al hombre y su condición bienaventurada, su caída y su recuperación. 
Vemos  que, en analogía con el Evangelio, trata de las actitudes gratas a Dios en contraste con la superficialidad de los preceptos humanos. 
La Ley como tal esa para vivir una relación de amor con Dios y con los demás. EL hombre, en cambio, presume reducir los preceptos morales a su conveniencia, y aun cuando "Dios" es una palabra muy usada en ciertos círculos de la Iglesia, a puertas cerradas vemos que no siempre se vive con la misma regla con que ajusticiamos a quienes son considerados "los impuros". 
¿Quien es grato a los ojos del Señor?
Salmo 15(14),2-3a.3cd-4ab.4-5.
El que procede rectamente 
y practica la justicia; 
el que dice la verdad de corazón 
y no calumnia con su lengua. 
y no calumnia con su lengua. 
El que no hace mal a su prójimo 

ni agravia a su vecino, 
el que no estima a quien Dios reprueba 
y honra a los que temen al Señor. 
El que no se retracta de lo que juró, 
aunque salga perjudicado; 
el que no estima a quien Dios reprueba 

y honra a los que temen al Señor. 
El que no se retracta de lo que juró, 
aunque salga perjudicado; 
el que no presta su dinero a usura 
ni acepta soborno contra el inocente. 
El que procede así, nunca vacilará.

Como punto final, deseo citar a nuestro Beato, Oscar Arnulfo Romero:

Las predicaciones que no hablan de la realidad desde la fe, son "palabras espiritualistas", "una palabra que puede sonar en cualquier parte del mundo porque no es de ninguna parte del mundo" (Homilìa del 10 de diciembre de 1977)
Predicación que no denuncia el pecado no es predicación del Evangelio (Homilìa del 22 de enero de 1978)

Josè Mendoza, OP


domingo, 26 de agosto de 2018

Palabras duras, pero que mueven conciencias

Las lecturas de hoy se pueden abarcar de la siguiente manera:

- ¿Si no les parece bien servir al Señor?, ¡decídanse!, ¿a quien van a servir? (1a lectura)

- Sed sumisos unos a otros con respeto cristiano (2a lectura)


- ¿Esto os hace vacilar? (Jesùs)


¿Còmo promover la misión- evangelización desde la promoción humana particular y comunitaria? ¿Cuàl es el aporte específico de la Orden para la labor de la Iglesia?

Con una iglesia menos institucional y màs del encuentro con los demás... de la familia con los demás.
La misiòn es para ir a encontrar otras culturas, no siendo asì el dìa de hoy.
(fr. Bruno Cadorè, maestro de la Orden)

Segùn la Neo-vulgata, la palabra usada en el evangelio citado evoca la "dureza" de las palabras de Jesùs. Algunos discípulos se escandalizaron y lo dejaron; él encara a los restantes, y es precisamente Pedro el primero en dar la resolución sobre su pertenencia a esta comunidad: "A quien iremos si sólo tù tiene palabras de vida eterna".

A algunos nos les gustan los desplazamientos, salir de las seguridades de su criterio megalómano. A esas personas cualquier parenèsis les resulta en "duras palabras" y les hace vacilar en cuanto a sus valores y su testimonio, algunas veces incongruente con su discurso moralista. En cambio, otros ven en ellos una voluntad divina inmersa segùn su beneplácito, y cambian de vida y de actitudes. Labor del predicador es tocar conciencias, no caer bien.

Se puede ser centinela de la verdad si hay pluralismo, pero una opinión no es la verdad, y la verdad no se impone, no tiene propietario (fr. Bruno Cadorè)

Ser sumisos quiere decir "respetándonos unos a otros"; incluso habiendo fallado seguimos teniendo una dignidad sobrenatural, ya que somos a imagen y semejanza de Dios" nuestra vocación es ir hacia la eternidad (Predicación y el celo apostòlico)

El estudio en el sentido que de elementos de discernimiento apostòlico para ser practicado de la mejor manera posible, es uno de los mayores desafíos de la Orden para el futuro. No estudiamos solamente para predicar bien, estudiamos para ayudar al mundo para amarse, conocerse y descubrir sus capacidades. No sólo se trata de enseñanza académica, debe dar paso a la investigación, de experiencias pastorales concretas en las cuales podemos contemplar la presencia activa de la gracia de Dios. (fr. Bruno Cadorè)

Mi casa y yo serviremos al Señor... siendo evangelizadores desde la capacidad del ser humano.

Josè Mendoza, OP