miércoles, 1 de abril de 2015

Comentario del Evangelio de hoy

Sn. Mateo 26, 14_25
Judas, el que lo iba a entregar, le preguntò_ "Serè yo, Maestro?". "Tù lo has dicho", le respondiò Jesùs.

Me viene a la mente la bella oraciòn de Sn. Felipe Neri: "Señor, guàrdame, porque puedo traicionarte peor que Judas". Esta frase nos recuerda al Publicano y el Fariseo. El primero pedìa perdòn a Dios de rodillas, mientras el segundo, agradecìa por no ser como "esos pecadores". Todos podemos entregar a Jesùs, aun por menos de 30 monedas de plata. Si recordamos un poco de historiografìa, a Josè hijo de Jacob, sus hermanos lo vendieron por 30 monedas tambièn. Es que el hombre es capaz de negociar los bienes eternos por bienes pasajeros cual si fueran propios, como la gracia santificante, ofertada a cambio del pequeñìcimo instante que nos traen el placer por el pecado. No valorar lo justo y pretender que los medios ilìcitos nos llevaràn a puerto seguro, es una verdadera insensatez digna de seres no racionales. A quienes màs les valdrìa no haber nacido, a esto se le llama hipérbole o exagerciòn. Estamos a las puertas del Triduo Pascual, conviene orar y reflexionar sobre la propia vida y los momentos en que nosotros tambièn hemos vendido al Señor, sustituyèndo su amor por cualquier cosa contingente. Y recordemos que todos somos pecadores y necesitados del Señor. 

Josè Miranda, laico dominico. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario