domingo, 11 de enero de 2015

Comentario del Evangelio de hoy. Sn. Marcos 1, 7- 11

Sn. Marcos 1, 7- 11

"Tú eres mi Hijo muy querido, en ti tengo puesta toda mi predilección.” 

_ Los catòlicos bautizan a los niños, pero si Jesùs fue bautizado a los 30 años, ¿por què no hacen lo mismo? _. Uno de los efectos del bautizo es quitar el pecado original, Jesùs no tenìa pecado alguno, por lo tanto no necesitaba del bautismo como un beneficio personal, si se hace bautizar es precisamente para bendecir las aguas del bautismo (Sacramento) y para bautizarnos con èl a todos nosotros. De ahí que somos hijos en el Hijo. 

En el dìa de nuestro bautizo, no se oyó nada extraordinario, pero es absolutamente cierto que:
- Se abrió el cielo para cada uno de nosotros.
- El Espìritu Santo bajò sobre nosotros.
- Y que el Padre Eterno nos dijo a cada uno de nosotros: "Tù eres mi hijo amado”.

De cierto que todo bautizado debe dar sentido a este gran regalo de Dios, es la misma actitud que Jesùs tomò, tal y como nos narra Sn. Pedro en la 2a. lectura: “Pasò haciendo el bien”. 


Josè Miranda, laico dominico

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